Hay una cita en el libro de José Antonio Martín Otín (Petón), "La desesperación del té", que refleja fielmente lo que quiero expresar en el siguiente poema. Éste es un libro sobre la relación entre algunos poetas de la Generación del 27 y parte de la anterior, 98, pero sobre todo es un libro sobre la Vida, entendiendo por vida, la Amistad, el Amor, la Entrega... y la Providencia que une a seres de distintos mundos en una misma realidad. Su autor ha tenido el privilegio y la sabiduría de concebirlo y escribirlo y nosotros la suerte de poder leerlo porque Petón es un sabio de la palabra pero sobre todo es un sabio de la AMISTAD.
Página 265. Dice así: "Hay amigos que vienen a nosotros a quitarnos el hambre, y nos dan pan y agua y vino. Hay amigos que vienen a quitarnos la pena y nos dan alegría y calma y certeza. Hay amigos que vienen a darnos vuelo y sueños y caminos. Hay amigos que vienen a ser bastón, brazo y pilar. Hay amigos que nos hacen únicos, verso y renacimiento. Hay amigos que cantan con nosotros la misma canción, piensan nuestro pensamiento, sufren nuestro dolor, y hay amigo, uno o ninguno, que todo eso a la vez".
El destino nos unió
en una misma vida
y cogidas de la mano
la recorremos desde niñas.
¿Donde quedaron aquellos
juegos, aquellas risas
de la infancia? No
penéis, van juntos con
nosotras a una misma
distancia.
Deber de agradecer al
al que nos puso en el mismo
camino recordando cada
momento que pasamos y
vivimos. Agradecer al
mundo que nos uniera
en un mismo cuento
para ir juntas de la
mano y rendir culto
al destino.
Amor que no se ve,
sólo se siente en
la seguridad de que,
si algo nos enturbiara
en la vida, estarás
conmigo para siempre
y nunca me quedaré
sin mi amiga.
Me llena de orgullo poder dedicar este poema a mis amigas de Lerín, las que nacimos a la vez y, desde entonces, no ha habido fuerza que nos haya separado. Siempre hemos estado ahí cuando nos hemos necesitado y así seguirá siendo mientras vivamos. Leales compañeras, eternas confidentes... Os quiero amigas.