viernes, 6 de mayo de 2016

MI ESPADA



  
 Siempre vacilante
con el miedo del despertar
e impertérrita en un mundo
donde aúlla la noche.
 
Absuelta de mis pecados
en mi tibio caminar
clamo la fe
que oprime mi yo.
 
Trato de desnudar al sueño
en desgarrador delirio
para, con mi espada,
bregar en tierra hostil.
 
Siempre vacilante
sangra el destino de mi azar
y rota en mil pedazos
me pierdo en la alucinación.