jueves, 21 de julio de 2016

BATALLA

 
¿Qué latirán los ojos
que tentaron de tu cuerpo
la ternura?
 
¡Estrella celosa
de este breve gozo
que nunca olvida!
 
Él asió mi silueta
en frescos campos
y lirios de azafrán.
 
Y en el bregar del dulzor,
entre el vivir y el soñar,
se abrieron tus calladas celosías
y de tu sola figura me vencí.
 
Reposa entre mis flechas
donde el ruiseñor
precia su pobre nido.
 
Y en el último suspiro de mi vida,
amor, que a ti me arde;
amor, que rasgas la punzante seda;
amor, que duermes lamentos,
entre esmeraldas, música serías.