sábado, 20 de septiembre de 2014

PIEDAD



Camino encendido de luces,
candiles en noche sombría.
Tu silueta en un caballo pardo.
Mi morada, a tu grupa ceñida.

Bosque de hiedra que espera
para inventar nuestro nido,
y allí darnos por entero
porque el destino así lo quiso.

Escapa conmigo al infinito,
donde nada nos detenga
ni aúlle el delito.
Encuentra un mundo para nosotros
donde existir siempre unidos.

Y la aurora nos hallará abrazados,
pidiendo la no ausencia a gritos.
Rogándole juntos al mundo
piedad, compasión, perdón y cariño.

Los caballos simbolizan la huida. Este poema me recordaba mientras lo iba escribiendo a Federico García Lorca y sus imágenes traducidas en sus obras teatrales, como el uso del tiempo futuro, el clima trágico, el bosque... y he sentido un orgullo que se ha apoderado de mí de manera realmente intensa...